En una emocionante revelación en el evento Token2049 celebrado en Dubai, Pavel Durov, director ejecutivo de Telegram, anunció planes ambiciosos para convertir pegatinas y emojis en activos digitales a través de tokens no fungibles (NFT). Este nuevo proyecto se desarrollará utilizando la tecnología blockchain de The Open Network (TON).
La conversión de estos elementos visuales en NFT permitirá a los usuarios no solo poseer sino también monetizar estos populares activos digitales. Durov hizo referencia al éxito anterior de Telegram con la tokenización de nombres de usuario, una iniciativa que recaudó la impresionante cifra de 350 millones de dólares en ventas, y los creadores recibieron el 95% de las ganancias.
Según Durov, "las NFT integradas en la comunicación cotidiana tienen el potencial de volverse virales". Lo ejemplificó con una pegatina que decía “pato humeante”, que captó una atención cultural generalizada. El CEO de Telegram expresó su entusiasmo por extender la tokenización para abarcar no solo emojis individuales, sino posiblemente conjuntos completos de stickers y emojis, convirtiéndolos en monedas meme.
Durov también destacó la importancia de la escalabilidad de la blockchain TON para soportar el gran volumen de transacciones que requerirá esta nueva funcionalidad. Además, abordó la estructura descentralizada de la plataforma, incluido un modelo de reparto de ingresos publicitarios en el que los canales reciben el 50 % de los ingresos generados y un modelo futuro que propone entregar el 70 % de los ingresos por propinas directamente a los creadores.
Este movimiento de Telegram tiene como objetivo no solo innovar la forma en que se comercializan y valoran los activos digitales, sino también fortalecer un enfoque más descentralizado que favorezca a los creadores de contenido. La iniciativa de Durov es un paso importante en el camino hacia una mayor integración entre la comunicación cotidiana y la economía digital, transformando potencialmente la forma en que interactuamos con el contenido digital básico.
